La Masonería es una Orden, o Sociedad Secreta; filosófica, filantrópica y progresiva; esparcida por todo el Mundo. Es una Escuela de enseñanza mutua, con un principio fundamental; la Tolerancia y la Fraternidad.
Sus fines son: unir a los hombres haciéndolos más libres y perfectos por medio del conocimiento racional de la Voluntad Superior que rige el Universo. Su aspiración es hacer de cada hombre, un Templo individual a la Gloria del Ser Supremo; lo que consigue desarrollando, en Grados sucesivos, el Principio Divino que le anima.
La definición oficial, universalmente aceptada, es la siguiente: “La Francmasonería es una Institución de Fraternidad Universal esencialmente filantrópica, filosófica y progresiva que proclama la existencia de un Principio Creador, bajo el nombre de Gran Arquitecto del Universo, y tiene por principio fundamental la Tolerancia mutua, el respeto de sí mismo y de los demás, y la libertad absoluta del pensamiento y de la conciencia. Por tanto, está abierta a los hombres de todas las razas y de todas las nacionalidades, cualesquiera que sean sus opiniones y creencias, con tal que sean libres y de buenas costumbres”.
Tiene por objeto la investigación de la Verdad, el estudio de la Moral y la práctica de la Solidaridad. Trabaja por el mejoramiento material y Moral, y por el perfeccionamiento intelectual y social de la Humanidad.
Hace extensivos a todos los hombres los lazos fraternales que unen a los Francmasones sobre toda la superficie de la Tierra, y la lucha incesantemente contra la Ignorancia y el Fanatismo bajo cualquier forma que se presente.
Aconseja
Durante los siglo XVII y XVIII en Francia y Europa en general, las Iniciaciones Egipcias rápidamente se tornaron muy populares, conquistaron París e irían a ejercer gran influencia en la mente de las autoridades masónicas de la época.
En el tiempo que el Emperador Napoleón Bonaparte efectuó su campaña en Egipto, él no conocía mucho del antiguo simbolismo Egipcio, ni de su religión y ni de su escritura. Luego de que Jean Francois Champollion encontró la “piedra Rosetta” y logró descifrarla y conocer el lenguaje jeroglífico se vino a saber más sobre el antiguo Egipto.
Es a través de las personas de esta época que viene la Tradición Secreta del Esoterismo.
Es en los Templos egipcios que los sacerdotes de todas las naciones vienen a tomar su conocimiento : Moisés, Salomón, Pitágoras así como todos los sabios de la antigüedad, sean griegos, romanos o árabes.
MISRAIM era el nombre que los judíos daban a la tierra de las pirámides y en esos tiempos su capital era MEMPHIS; allí se ubicaban los Templos Iniciáticos. Posteriormente los griegos a este lugar llamaban EGIPTO porque significa “Tierra quemada o tierra negra”, debido al color de la tierra, luego de las inundaciones del río Nilo.
Desde entonces y desde allí, los conocimientos esotéricos han sido transmitidos a otros lugares del mundo, hasta nuestros días por una cadena de Iniciados.
En la Edad Media, durante las Cruzadas, algunos Caballeros pertenecientes a la Orden del Templo (Templarios) fueron iniciados en Palestina, por descendientes de los Esenios que provenían, de otra Orden iniciática denominada «Los Hijos de la Luz», fundada en Egipto durante los primeros siglos del Cristianismo. Son precisamente a estos «Caballeros del Temple» a los que el Rito de Memphis reconoce como a sus fundadores inmediatos.
Luego del trágico fin de los Templarios, la línea Iniciática continuó secretamente a través de la Orden Rosa Cruz y la Masonería, logrando su mejor expresión en el Rito Oriental de Memphis – Misraim. Estos Ritos son depositarios de la tradición esotérica de las antiguas Escuelas de Misterios de Egipto.
La mayoría de los oficiales militares que acompañaban a Napoleón eran masones de antiguos Ritos iniciáticos, tales como los Philaletes, los Hermanos Africanos, el Rito Hermético, los Philadelfos, el Rito Primitivo de Narbona y miembros del Gran Oriente de Francia.
En Egipto, los masones del ejército francés descubrieron un centro gnóstico-hermético que conservaba antiguas tradiciones.
En 1798 los Generales Bonaparte y Clever fundaron en El Cairo la Logia Isis . Dicha Logia estaba integrada por numerosos sabios franceses que mantenían vínculos fraternales con los iniciados egipcios.
Este Rito se constituyó el 23 de mayo de 1815 (?) en la localidad de Montauban, Francia.
Sus fundadores fueron GABRIEL MATHIEU MARCONIS DE NÉGRE, oficial de la armada napoleónica de Egipto, y el general francés SAMUEL HONIS. La primer Logia Madre que fundaron recibió el nombre de “Los Discípulos de Memphis ” sobre la base de la Logia «Isis » de Egipto.
Terminada la campaña militar y de vuelta a su patria los soldados se unen a los Ritos ya indicados, así es como el Rito de Memphis se extendió rápidamente por Francia e Italia. Se abrieron Logias en Marsella y Bruselas. Pero tampoco lograron que el Gran Oriente de Francia los reconociera como masonería «regular”. Las Logias de Memphis fueron cerradas por autoridades civiles francesas en 1852, y el Rito entró en una etapa de “sueño”.
Jean Etiénne Marconis de Négre, hijo del fundador del Rito, en su libro “Le Sanctuaire de Memphis” (París, 1849), afirma que la filiación iniciática proviene directamente de Palestina, y que tiene su origen en los Caballeros Templarios. Es importante señalar que luego de la abolición de la Orden del Temple en Francia, los principales refugios de los Caballeros Templarios estuvieron en Escocia y en Suecia.
Diez años más tarde, Marconis solicitó nuevamente al Gran Oriente de Francia su incorporación para revivir este Rito. El Gran Oriente consultó al Gran Colegio de Ritos de Francia y esta vez obtuvo la aprobación, y fue oficialmente admitido en la masonería “regular” francesa en noviembre de 1862.
Marconis, como Gran Hierofante del Rito de Memphis, tuvo que rendir su autoridad sobre el Rito al Gran Oriente. Esto quiere decir que únicamente el Gran Oriente de Francia podría otorgar Cartas Constitutivas para la creación de nuevas Logias del Rito de Memphis.
Marconis recibió la autorización para “despertar” el del Rito, y el permiso para reabrir las Logias cerradas por la policía. Pero una condición más grave aún se le imponía: estas logias de Memphis sólo podrían trabajar en los rituales de los tres primeros grados de la Masonería Universal.
A continuación, esta es la lista de los Grandes Maestres Mundiales, llamados Grandes Hierofantes:
1838: Jean Etienne Marconis, Francia
1869: Marqués de Beauregard, Egipto
1874: Salvatore A. Zola, Egipto
1881: José Garibaldi, Italia (Ver foto)
Aunque anteriormente eran dos Ritos similares se logró su fusión en 1881 y Giuseppe Garibaldi forma la Federación de los Ritos de Memphis – Misraim, luego en 1902 Theodore Reuss, establece el Soberano Santuario de Memphis – Misraim en Alemania, y agrupa los Grados de Memphis y Misraim en una misma estructura.
John Yarker recibió su poder de Harry Seymour de Norteamérica, quien a su vez recibió una Carta Patente de Marconis . El Santuario de John Yarker contenía 97º grados y Funcionó entre 1903 y 1912.
Theodor Reuss, de Alemania, recibió su poder del Soberano Santuario de Inglaterra de John Yarker.
Gerard Encausse, Papus, recibió su poder del Soberano Santuario de Alemania de Theodor Reuss, mediante Carta Patente del 24 de junio de 1908.
El Gran Maestro era Papus y el Gran Maestro Adjunto era Charles Détré (Téder).
De 1908 a 1916, Papus fue el Gran Maestro del Soberano Gran Consejo General del Rito de Memphis-Misraim para Francia. Desde 1916 (muerte de Papus) a 1918 el Jefe del Rito fue Charles Détré (Téder).
A la muerte de Teder, desde 1918 a 1934, el Jefe del Rito fue Jean Bricaud quien escribió el libro «Notas Históricas sobre el Rito Antiguo y Primitivo de Memphis Misraim«, publicado en 1933.
A la muerte de Jean Bricaud, le sucedió Constant Chevillón y su sucesor fue Henry Dupont de 1944 a 1960 y trascendente de la Masonería.